Seis pares de zapatos para la acción : una solución para cada problema y un enfoque para cada solución
Tipo de material: TextoSeries Paidos plural ; , 21Detalles de publicación: Barcelona : Ediciones Paidos, 1992Descripción: 179 pISBN: 8449309123Tema(s): ADMINISTRACION | PERSONALIDAD | PENSAMIENTOClasificación CDD: 153.42 Tema: El pensamiento es sólo una cara de las cosas. La otra cara es la acción. Ocasionalmente, el pensamiento es un fin en sí mismo, pero por lo general el propósito del pensamiento es escoger o diseñar un curso de acción. A veces, primero se produce la fase del pensamiento y luego la fase de la acción. En otras ocasiones, ensamiento y acción están tan entrelazados que el pensamiento se instala en el mismo curso de la acción. Los zapatos implican acción. Si usted no se dirige a ningún sitio, entonces no necesita zapatos. Los zapatos, como la acción, sirven para alcanzar un objetivo. Los zapatos son para la acción lo mismo que los sombreros para el ensamiento. El gran éxito del sistema de los seis sombreros para pensar me sugirió la posibilidad de crear un sistema parecido para la acción. Cada situación requiere un estilo distinto de acción. Para pintar una cáscara de huevo es necesaria una acción muy delicada, absolutamente distinta de la que exige un combate de boxeo".Tipo de ítem | Biblioteca actual | Colección | número de clasificación | Copia número | Estado | Fecha de vencimiento | Código de barras |
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Libro General | Biblioteca Central | Colección General | 153.42 D287SE (Navegar estantería(Abre debajo)) | 1 | Disponible | 3560900134270 |
El pensamiento es sólo una cara de las cosas. La otra cara es la acción. Ocasionalmente, el pensamiento es un fin en sí mismo, pero por lo general el propósito del pensamiento es escoger o diseñar un curso de acción. A veces, primero se produce la fase del pensamiento y luego la fase de la acción. En otras ocasiones, ensamiento y acción están tan entrelazados que el pensamiento se instala en el mismo curso de la acción. Los zapatos implican acción. Si usted no se dirige a ningún sitio, entonces no necesita zapatos. Los zapatos, como la acción, sirven para alcanzar un objetivo. Los zapatos son para la acción lo mismo que los sombreros para el ensamiento. El gran éxito del sistema de los seis sombreros para pensar me sugirió la posibilidad de crear un sistema parecido para la acción. Cada situación requiere un estilo distinto de acción. Para pintar una cáscara de huevo es necesaria una acción muy delicada, absolutamente distinta de la que exige un combate de boxeo".
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